Argentina sorprende al viajero con sus poderosos contrastes. Recorrer Patagonia es dejarse seducir por la magia de gigantes de hielo, escarpados picos andinos, densos bosques de ñires, lengas y coigües, espejos de agua alimentados con el deshielo de las altas montañas, solitarias playas refugio de lobos y leones de mar y un profundo océano surcado por ballenas. Y como perfecto complemento la gran capital, Buenos Aires, elegante y colorida.